¿POR QUE A MI?



Queridísimos lectores no quiero abrumaros con los dramas que atenazan mi vida, sólo espero que seáis pacientes conmigo y entendáis que circunstancias como la que os relataré no le ocurren a todo el mundo, de ahí la pregunta ¿por qué a mí?
¡He perdido el relleno de mis sostenes! ¡Ah Dioses! ¿por qué sois tan crueles conmigo? Sé que alguna diosa siente envidia de mi inconmensurable belleza, de mi larga cabellera rubia de perfectos bucles que centellean al sol, de mis insinuantes curvas, de mis enormes ojos almendrados del color de la miel en primavera, sé que mi boquita de pitiminí, carnosa y besucona las llena de celos, (sólo las tetas fallan en este esplendoroso marco) sé que las diosas me odian y los dioses me desean, pero ¿tanta crueldad son capaces de volcar en mi? ¿Habrán sido capaces de robar mis tetas postizas?
No os pido que los busquéis, no, tal vez se han ido por propia voluntad, dejaré que busquen su destino en otras tetas, tal vez se han unido a las bragas traidoras, no importa, lloraré su ausencia pero los sustituiré.
No será lo mismo porque las vivencias que compartimos no se repetirán. Recuerdo  las risas que nos echamos a cuenta de que con las prisas por colocarlos entre mis lamentables tetas y el sostén, no los situé adecuadamente y uno miraba pa Cuenca y el otro pa Sidi Ifni; o aquel otro día que me quedé atrapada en medio de una lluvia torrencial y cuando llegué a casa las tetas me llegaba al ombligo, porque no os lo he dicho aún pero el relleno es de guata que absorbe más agua que un camello sediento, ¡Qué de risas que compartimos¡.
Si veis un par de calcetines rellenos de guata, esas son mis tetas. Uno lleva dibujitos del Mag…uy perdón del ratón Mickey y el otro del gato Félix.
Pero me sobrepondré y me fabricaré nuevos rellenos, ya tengo los elementos, un calcetín con dibujitos de unas galletas marca Dora y otro de un Chocolate, esta vez los rellenaré de papel de periódico porque con la crisis no me llega ni para guata, de paso aprovecharé para adquirir una talla más, y que rabien esas diosas tetiflojas.
Si alguien los encuentra y se le ocurre ponérselos que sepa que llevan partículas de mi piel adheridas a ellos, ya que durante años no se separaron de mi ni para dormir, con ellos puestos hacía el amor, (de esto hace mucho tiempo pero aún me acuerdo), con ellos pasé por el quirófano, con ellos puestos despiojé a mis gatos, años de mi piel viven en ellos.
No sufráis por mí ya que dentro de nada luciré unas esplendorosas tetas gracias a mis rellenos que harán juego con mi inabarcable belleza.