Acabo de ver Luna Nueva y con una palabra podría acabar esta crítica: puaj, pero voy a explicar el porqué de esta interjección tan descriptiva.
La venden como una película de vampiros y yo me pregunto ¿dónde están los vampiros? Porque para mí los vampiros son gentes que además de ser paliduchos tienen unos colmillos que clavan en cualquier cuello de buen ver y en toda la peli los únicos colmillos que se ven son los de los lobos.
Otra cosa más los lobos, dice la muchacha en un momento de la cinta “o sea que eres un hombre lobo” nooooooooo, no chica no, es un hombre y luego un lobo pero no un hombre-lobo, los hombres lobo tienen algún rasgo característico que les diferencia de los lobos a secas y en la peli cuando se transforman lo hacen de hombre a lobo sin intermedios.
Más, ¿es que en el pueblo todos son daltónicos? Porque una cosa es ser pálido y otra cosa ser un merengue con patas como el prota (supuestamente el guapo de la peli). Sigo, ¿porqué todo el tiempo hablan en susurros? Hasta cuando gritan susurran. Y sigo ¿Sabe el director que además de primeros planos, hay planos intermedios, planos cortos, planos generales etc. etc.? Porque casi se les pueden contar los poros de la nariz a los dos hermosos adolescentes que protagonizan la peli.
Otra queja, después de muchicientos de años dando vueltas por ahí el muchacho supuestamente vampiro podría haber dedicado 5 minutos a echar algún musculito, porque está esmirriado. Lechoso, escuchimizado y no muerde, no se qué le ve la prota.
Se supone que el hecho de que el sol le haga echar humo demuestra que es un vampiro ¡ja! Deberías haberme visto a mí cuando tomé el sol en Tenerife, humo no ¡echaba fuego! Y no soy vampira, vampiresa lo fui pero chupasangre por ahora no.
Total que si me la venden como una nueva versión de Romeo y Julieta aún hubiera tragado pero como una de vampiros no, si no hay colmillos no hay vampiros.
Firmado y rubricado.