¡Menudas vacaciones habéis tenido mis queridísimos alumnos! ¿Habéis estado haraganeando o habéis practicado alguna de las exquisitas recetas que os enseñé? Yo he estado investigando para vosotros, para traer novedosas y únicas recetas a vuestros zarrapastrosos paladares.
Vamos allá, basta ya de descansar, empezaremos con algo suave y facilito para que vuestros cerebros no se colapsen.
Para llevar a buen término esta receta necesitaremos lo siguiente:
Una base de pizza (de las congeladas no os vayáis a herniar haciéndola vosotros mismos)
Flores silvestres, yo recomiendo amapolas pero una margarita también va bien, nada de rosas ni claveles no viene al caso.
Un sol, si ¿Qué? Un sol, lo recortáis de alguna revista, dejo para los más creativos dibujarlo y luego recortarlo pero la mayoría de vosotros no llegáis a tales cotas de laboriosidad por lo que me conformo con que lo recortéis. Dejo este ejemplo por si alguno aun no ha entendido a que me refiero.
Un montoncito de arena.
Hojas secas, si son de parra con una sobra y basta (sabido es que la hoja de parra es grande como para tapar las vergüenzas del Sr. Adán) en cambio si son de buganvilla necesitareis un puñadito.
Un par de cubitos de hielo, si tenéis una nevera de esas que hace escarcha mejor que mejor, tanto una cosa como la otra las dejaremos en la nevera hasta el momento de su uso no se nos vaya a derretir.
Una máquina fotográfica, a los pijos les es permitido usar una filmadora pero es excesivo, en realidad con una camarita normal vas que ardes.
Un corta pizzas, tijeras, o cuchillo.
Una bolsa de plástico (aprovechad para reciclar y usad una de esas que os dan en el super)
Un bocata de pan con tomate y jamón de jabugo y una cervecita fresquita.
Y ya está vamos a preparar la pizza. Usamos lo que hayamos escogido para cortar la pizza y le damos dos tajos en forma de cruz de manera que queden cuatro porciones.
En una de las porciones depositamos la flor en representación de la primavera, en la siguiente el sol y la arena que será el verano, a continuación las hojas o sea el otoño y finalmente los cubitos o escarcha que por supuesto es el invierno.
Cogemos la cámara y hacemos fotos a derecha e izquierda, desde arriba o abajo, de costado iluminada de frente y de lado, en fin fotos a porrillo, una vez hecho esto usaremos la bolsa para meter la pizza dentro de ella y todo junto al cubo de la basura.
Cogemos el bocata y nos lo zampamos acompañado de la cervecita.
Y hasta aquí la receta, recordad que siempre os quedaran las fotos para recordar que habéis hecho la Pizza 4 estaciones made in El Batibull.
¡Que aproveche!
