Uno
de una hamburguesería. Porque dice “lo conocí en la fila”
cuando debería decir “lo HE conocido en la fila”, que para eso
están los tiempos verbales. Quito la voz.
Uno
de un producto de belleza que presenta Eva Longoria. Porque la
dobladora tiene un problema de frenillo o sea de dicción, no
pronuncia la n sino una d, dice do me gustaría en lugar de no me
gustaría, esa dobladora dobla habitualmente a Eva y a otras
actrices, siempre que sale ella cambio de canal o apago el sonido.
Quito la voz.
Uno
de una empresa de créditos. El motivo es el mismo de antes , uno de
los actores dice “do todo es tan difícil”, me revienta los
oídos. Quito la voz.
Uno
de una radio. Porque no soporto al Cárdenas (ni a su hermana) Cambio
de canal.
Uno
de otra radio. Porque el presentador tiene ojos legañosos. Cambio de
canal.
El
nuevo del Corte Inglés. Porque el que canta tiene voz de persona
mayor y no cuadra con el bailongo que está en cámara. Cambio de
canal.
La
mayoría de los de Trivago. Porque múltiples razones, desde los
actores y actrices que contratan hasta la historia que explican y
cómo la explican. Cambio de canal.
Uno
de esos de “vende todo lo usado”, porque el baile que realiza la
actriz es tan vulgar, grosero y macarra, que me irrita los ojos.
Cambio de canal.
Todos
los que hablan de enemas. Porque son asquerosos, puaj. Cambio y
corto.
Está
claro que el control de calidad y aquello de “el mínimo exigible”
no es algo que se use en publicidad.
La
lista es más larga y va aumentando a medida que emiten nuevos
anuncios pero ahora mismo estos son los que me vienen a la mente, ya
iré añadiendo más.
